La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia entre la población de adultos mayores en el mundo, la cual afecta gravemente la capacidad de una persona de llevar a cabo sus actividades o rutinas diarias.
El Alzheimer, de acuerdo al sitio especializado en medicina Medlineplus, comienza lentamente. Primero afecta las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Y, posteriormente, desencadena problemas de conducta como la agresividad, la ansiedad y hasta la depresión.
Con el propósito de trabajar en la prevención de esta enfermedad, que proyecta unos 600 mil pacientes para el año 2050, un grupo de investigadores chilenos creó un test que permitirá diagnosticar esta afección 10 años antes de que se desarrolle.
La importancia de la prevención
El doctor Ricardo Maccioni, neurocientífico del Centro Internacional de Biomedicina (ICC), sostuvo en entrevista con Meganoticias Alerta, que «lo importante de poder detectar el Alzheimer tempranamente está directamente relacionado con la prevención».
El especialista sostuvo que el desarrollo de este tipo de pruebas permite que la enfermedad sea tratada oportunamente, tener mejor pronóstico y mejores posibilidades de frenarla.
De acuerdo al doctor Maccioni el laboratorio del ICC desarrolló una innovadora y avanzada tecnología para la detección temprana del Alzheimer, basado en biomarcadores moleculares.
El neurocientífico destacó que de ser aprobado o reconocido esta prueba, el desarrollo de este tipo de demencia podría retrasarse de forma notable. «Si planificas una estrategia preventiva, que normalmente la gente no tiene, como la realización de ejercicios aeróbicos», lo más probable es que se retrase la enfermedad o que no se manifieste.
La alimentación es clave
El especialista enfatizó que no sólo la práctica de actividades físicas contribuyen a evitar la enfermedad; la alimentación también es un factor clave para el desarrollo de la misma.
«Ciertos tipos de alimentos o ciertos tipos de regímenes de alimentación ayudan mucho, como por ejemplo la dieta mediterránea«, explicó.
Dicha dieta consiste en reducir el consumo de carnes e hidratos de carbono, y consumir más alimentos vegetales y grasas monoinsaturadas que la obtenemos de la plata o el aceite de oliva.
«De igual manera hay alimentos funcionales y/o medicamentos naturales como la corcumina que ayudan con la demencia», dijo.